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El Gerente Municipal sostuvo un encuentro con los adjudicatarios del viejo mercado Municipal que permitió solventar ciertos requerimientos alusivos a la nueva dependencia de alimentos. Luego de la protesta registrada el pasado martes en las adyacencias del Palacio Municipal, en la que un grupo de adjudicatarios solicitó un diálogo franco con las autoridades municipales para aclarar algunas dudas sobre su posible traslado a las instalaciones del nuevo Mercado Carlos Manuel Piar, este lunes en horas de la mañana se concretó el encuentro que dio respuesta a los beneficiarios.
Tras escuchar a la vocería del grupo de adjudicatarios, el gerente municipal consultó con su equipo de trabajo y determinó que el antiguo Mercado Municipal de San Félix continuará funcionando, pues afirmó no tener impedimento en que ambos mercados-tanto el viejo como el nuevo- coexistan para ofrecer sus servicios a los guayacitanos.
“Estamos aquí para buscar una solución en conjunto, a la final debemos ganar todos y en beneficio de la ciudad (…) garantizamos la estabilidad laboral en el viejo mercado” expresó el Alcalde al inicio de la conversación, lo que se sumó el apoyo al unísono de parte de los adjudicatarios.
En cuanto al antiguo recinto, el gerente municipal aclaró que no será demolido, pues forma parte de un patrimonio municipal que debe conservarse. Se comprometió a su vez con el mantenimiento mensual de esta infraestructura para mejorar las condiciones laborales de los cientos de trabajadores que hacen vida allí.
Ante la preocupación de los adjudicatarios sobre rumores de desalojo que hacían eco en el Mercado, el Alcalde explicó que esto no ocurrirá y que la construcción del nuevo recinto continuará a paso firme, pues se espera su inauguración para julio. “Nosotros continuaremos el trabajo en el nuevo mercado y ustedes con el suyo en las viejas instalaciones”, expresó el burgomaestre.
Por otra parte, algunos adjudicatarios plantearon la propuesta de que eventualmente les fuese cedida la vieja infraestructura en comodato, para ellos administrar y mejorar sus condiciones. El burgomaestre aclaró que esto no es posible, pues el mercado es un bien municipal y es responsabilidad de su administración el buen funcionamiento de ese recinto.
La reunión de trabajo también determinó que para realizar mejorías o reformar el área de trabajo por iniciativa de los adjudicatarios, es necesaria la presencia de una comisión de ingenieros designada por el ayuntamiento, que dé aval de cada acción a tomar y garantice la legalidad de los procedimientos.
Carlos Ramírez, adjudicatario desde hace más de una década, expresó sentirse complacido tras la reunión con el Alcalde, espera que se implementen mejoras concretas en la nueva estructura y que el nuevo mercado represente el alivio prometido por la gestión actual. Ramírez argumentó una serie de recomendaciones puntuales en cuanto a la obra, que fueron entregadas al gerente municipal para su consideración.
Por último, el alcalde José Ramón López pidió a los adjudicatarios y público presente que le apoyen en su gestión, pues la construcción del nuevo mercado brindará un ambiente de trabajo idóneo y acorde a la modernidad. “Quiero que me acompañen en mi sueño de cambiar a Ciudad Guayana para siempre” exclamó el burgomaestre, lo que produjo expresiones de algarabía y vitoreo entre los asistentes.