Gestión
305 emprendedores beneficiados. Los trabajadores de estos espacios pasaran a ser contribuyentes formales de la municipalidad. La Alcaldía se comprometió a hacer reparaciones en los locales y trabajos especiales en la recolección de desechos sólidos
El Centro Micro empresarial La Esperanza, se encuentra ubicado al final de la calle Ramírez de San Félix, donde pequeños empresarios trabajan de manera incansable para poder llevar el sustento a cada uno de sus hogares, pero hasta la fecha habían venido trabajando un tanto desorganizados, pues gestiones anteriores no asesoraron bien a estos trabajadores.
En virtud a esta situación, el alcalde de Caroní José Ramón López a través de la Dirección de Rentas Municipales, atendió al llamado de estos micros empresarios, logrando recabar información con un censo, además de conocer las necesidades que presentan estos trabajadores.
El director de este despacho, Raúl Mora, manifestó que este centro fue inaugurado hace trece años, con un total de más de 270 trabajadores, y que hasta la fecha existen más de 300, los cuales ahora cuentan con una personalidad jurídica, gracias a los acuerdos establecidos desde la municipalidad con los micro empresarios.
“Ahora los estamos llevando a la organización, para que puedan exigir sus derechos, y puedan velar por un mejor nivel económico, por un seguro social, y se dignifiquen a todas estas personas que allí trabajan”, indicó Mora.
Resaltó que gracias a unas elecciones dentro de los mismos trabajadores, se conformó la Asociación Civil de micro empresarios de La Esperanza, de tal manera que cuentan con una junta directiva, pero desde la municipalidad se van a conformar todos los estatutos de dicha asociación, para poder formular sus exigencias de acuerdo a sus necesidades.
A nivel de infraestructura, Mora manifestó que la Alcaldía Socialista Bolivariana de Caroní, trabajará de manera mancomunada en la reparación de algunos espacios, además de un trabajo mancomunado en la recolección de desechos sólidos.
Asimismo dijo que serán los mismos trabajadores los que convertirán estos espacios en un lugar de entretenimiento digno, y que les brinde justicia social, ya que de trabajadores informales pasarán a ser contribuyentes formales del municipio, cambiando su estatus económico, mejorando su calidad de vida.